El Thunder en ventaja es ahora una amenaza real al título. Oklahoma City dio un golpe de autoridad al vencer 128-126 a los Timberwolves en Minnesota, y con eso, colocarse 3-1 en la serie final del Oeste.
Fue una noche de baloncesto vibrante. Y el hombre del momento volvió a ser Shai Gilgeous-Alexander, quien firmó una actuación monumental: 40 puntos, 10 rebotes y 9 asistencias. Una línea estadística digna de un MVP, en un momento crucial.
Una victoria de distancia
Con esta victoria, Oklahoma City está a un solo triunfo de volver a una Final de la NBA por primera vez desde 2012. Y lo hicieron con carácter. Apenas 48 horas después de una dura derrota por 42 puntos, el Thunder se levantó con corazón y puntería.
Jalen Williams también brilló, con 34 puntos y seis triples, mientras que Chet Holmgren respondió a su ciudad natal con 21 puntos, siete rebotes y tres bloqueos. En defensa, Luguentz Dort lideró la presión sobre Anthony Edwards, quien fue contenido a solo 16 puntos. Julius Randle también fue neutralizado.
Aunque los Wolves apretaron con Nickeil Alexander-Walker (23) y Donte DiVincenzo (21), el Thunder siempre tuvo respuesta. Solo estuvieron abajo en el marcador por 36 segundos, todos en el primer cuarto.
Shai selló el triunfo desde la línea de tiros libres con apenas 6.1 segundos en el reloj. Y con apenas 0.3 segundos por jugar, Jalen Williams atrapó el último balón que ahora pone al Thunder con la posibilidad de definir en casa.
La historia puede repetirse. Solo falta una victoria más.