San Francisco vivió una jornada electrizante. Los Gigantes resurgentes mostraron su poder ofensivo y aplastaron 8-2 a los Rockies en el Coors Field, impulsados por los jonrones de Rafael Devers, Willy Adames y Drew Gilbert. Con esta victoria, los Gigantes conectan cuadrangulares en 15 juegos consecutivos, algo que no lograban desde 2001.
Devers recupera su toque de All-Star
El partido arrancó con un espectáculo de poder. Rafael Devers abrió el marcador con un jonrón de 411 pies hacia el jardín derecho, su 29no de la temporada y el más potente registrado por un Gigante desde 2015, con 114.5 mph de salida. Tras un inicio irregular en la temporada, Devers ha retomado su nivel, bateando .299 con 10 jonrones en sus últimos 29 juegos.
Drew Gilbert siguió la ofensiva, conectando su segundo jonrón de la campaña, de dos carreras, para ampliar la ventaja a 3-0. La celebración fue un reflejo de la química del equipo: el tercera base Matt Chapman tomó a Gilbert del cuello en un gesto de entusiasmo y camaradería.
Finalmente, Willy Adames coronó la tarde con un jonrón de dos carreras en la séptima entrada, consolidando la victoria y acercándose a los 30 jonrones de la temporada, algo que ningún Gigante ha logrado desde Barry Bonds en 2007.
El pitcheo también respondió. Kai-Wei Teng, recién llamado de Triple A, se llevó la victoria tras lanzar 5 entradas y un tercio, ponchando a ocho y permitiendo solo dos carreras en su quinta aparición del año.
Los Gigantes resurgentes han ganado ocho de sus últimos nueve partidos, volviendo a .500 por primera vez desde el 10 de agosto, y demuestran que su fuerza ofensiva está más viva que nunca.