Una ciudad unida por el béisbol
La Serie Mundial no solo ha encendido los diamantes. También ha movido el pulso de toda una ciudad. En Toronto, los Raptors y los Maple Leafs decidieron modificar sus horarios para no coincidir con los juegos de los Blue Jays, el orgullo nacional que vuelve a disputar un título después de más de tres décadas.
El Rogers Centre, ubicado en el corazón de la ciudad, será el epicentro de la emoción este viernes y sábado, cuando se celebren los Juegos 1 y 2 del clásico de otoño. Ambos comenzarán a las 8:00 de la noche, hora del Este.
Por eso, los Raptors adelantaron su juego inaugural ante Milwaukee, que pasará de las 7:30 a las 6:30 p. m. Y los Maple Leafs moverán su duelo del sábado contra Buffalo, de las 7:00 a las 5:00 p. m. Una decisión estratégica, pensada para que los fanáticos puedan disfrutar de todo sin elegir entre el hielo, la duela o el diamante.
El espíritu deportivo de Toronto
“Los aficionados al deporte de Toronto son, sin duda, de los más apasionados del mundo”, declaró Keith Pelley, presidente de Maple Leaf Sports & Entertainment.
“Nos enorgullece que los equipos de la ciudad se unan y les brinden la oportunidad de vivir un momento histórico para nuestra ciudad y para el país”.
El apoyo va más allá del cambio de hora. Tanto los Raptors como los Maple Leafs transmitirán los juegos de la Serie Mundial en la pantalla gigante del Scotiabank Arena después de sus partidos, convirtiendo cada jornada deportiva en una auténtica fiesta colectiva.
Toronto vibra al unísono. El béisbol manda, y el resto del deporte canadiense… responde con respeto.