Hoy celebramos el cumpleaños número 91 de Ozzie Virgil, un hito en la historia de las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) como el primer dominicano en jugar en esta liga. Fue un día memorable el 23 de septiembre de 1956 cuando Virgil se convirtió en el tercera base titular de los Gigantes de Nueva York, enfrentando a los Phillies de Filadelfia.
La contribución de Virgil abrió las puertas para sus compatriotas dominicanos, marcando el comienzo de una exitosa trayectoria de jugadores de béisbol dominicanos en las Grandes Ligas. Su legado es fundamental en la historia del deporte, y su presencia sigue siendo destacada en la actualidad. Recordamos su tiempo como manager de los Venados de Mazatlán en México, donde demostró su pasión y habilidades para guiar a los equipos.
Considero que en República Dominicana debería establecerse un día especial para honrar a Ozzie Virgil mientras esté en vida, tal vez «El día de Ozzie Virgil». Sería una oportunidad para rendir homenaje a su carrera sobresaliente y a su contribución invaluable al béisbol dominicano.
Finalmente, me gustaría compartir un hermoso poema del poeta español Antonio Machado, que refleja la importancia de seguir adelante, crear nuestro propio camino y dejar una huella duradera en nuestro viaje.
Caminante
Son tus huellas el camino y nada más
Caminante, no hay camino
Se hace camino al andar
Al andar, se hace camino
Y al volver la vista atrás
Se ve la senda que nunca
Se ha de volver a pisar
Caminante, no hay camino
Sino estelas en la mar
Con información de nota escrita por Fernando Ballestero / Facebook