Inoa y Los Reales nos regalaron una doble tanda que tuvo de todo: pitcheo dominante, ofensiva explosiva y ese sabor a competencia que solo se vive en la Liga Hermanos Latinos de Brooklyn.
Juego 1: Inoa domina con clase
El primer partido fue todo para Inoa. Con una actuación para enmarcar, Junior Arias subió al montículo con el corazón en la mano y no permitió ni una carrera en seis entradas. Un dominio absoluto que combinó con una defensa sin fisuras y una ofensiva que supo hacer daño en el momento preciso.
Los protagonistas al bate fueron Jean Carlos Cerda, Mike Quezada, Martín Checo, Franklin Méndez, Jordan Concepción y José Ramón López, quienes respondieron con batazos oportunos para sellar una victoria por 4-0. Inoa parecía imparable.
Juego 2: Los Reales responden con contundencia
Pero esto es softbol, y nada está escrito. En el segundo encuentro, Los Reales salieron con hambre de revancha y respondieron a lo grande: blanqueada de 8-0 y una energía distinta que cambió la historia del día.
Aunque Inoa intentó reaccionar, especialmente con los bates de Franklin Méndez, Keven Torres y Ángel Herrera, esta vez el rival fue más y no hubo forma de revertir el resultado.
Una jornada que deja huella
Este empate deja claro que el nivel está parejo y que cualquier cosa puede pasar en las próximas fechas. Dos equipos que lucharon cada lanzamiento, cada jugada, y que se ganaron el respeto mutuo a fuerza de entrega en el terreno.
Porque más allá del marcador, lo que vimos fue una fiesta de béisbol, una muestra del talento latino que hace vibrar a Brooklyn cada domingo.
