La jornada dominical del béisbol invernal dominicano tuvo un nombre propio: Leones y Toros. Ambos equipos mostraron su carácter, lograron victorias importantes y escalaron al segundo lugar de la tabla de posiciones.
En el estadio Quisqueya Juan Marichal, los Leones del Escogido rugieron con fuerza tras un inicio complicado. Perdían 0-5 ante los Tigres del Licey, pero un impresionante rally de ocho carreras en el cuarto episodio cambió por completo la historia del juego.
Yamaico Navarro, con una destacada actuación de 5-4 y dos carreras impulsadas, fue el motor ofensivo de los escarlatas, mientras que Franchy Cordero contribuyó con tres imparables decisivos. Un error defensivo de los Tigres y un lanzamiento desviado abrieron las puertas para una remontada que culminó en una victoria 10-5.
El derecho Luis Santos (1-0) se llevó el triunfo tras una sólida entrada en blanco, mientras que Joaquín (1-1) cargó con la derrota al no poder sacar un solo out en ese temido cuarto inning.
“Fue un juego de corazón”, dirían los fanáticos. El Escogido no solo ganó, sino que envió un mensaje claro: está listo para competir de tú a tú con cualquiera.
Toros bravos en el Corral
En La Romana, los Toros del Este también salieron a torear su destino. Con poder y buen pitcheo, vencieron 7-2 a unas Estrellas Orientales que no logran salir de su mala racha.
Rafael Lantigua y Gustavo Campero conectaron jonrones, mientras que Bryan de la Cruz impulsó dos carreras clave. En la lomita, Aaron Sánchez (2-0) brilló con seis entradas de calidad, dominando con autoridad y control.
Los Toros (5-5) igualan así con los Leones en el segundo peldaño, mientras que las Estrellas (4-7) siguen en caída libre, acumulando siete derrotas seguidas.
El único que no pudo ver acción fue el público de San Francisco de Macorís, donde la lluvia obligó a suspender el encuentro entre Águilas Cibaeñas y Gigantes del Cibao.
Una jornada intensa, de rugidos y batazos, donde Leones y Toros recordaron que en la pelota invernal, el coraje también se anota en la tabla.
