Dos historias, una meta: hacer historia
Después de casi ocho meses de temporada y tres rondas intensas de playoffs, la NBA entra en su capítulo final: las Finales 2025 ya están aquí.
Este jueves 5 de junio, los Oklahoma City Thunder y los Indiana Pacers se ven las caras en una serie inédita, que garantiza un campeón diferente. Ambos equipos buscan su primer anillo NBA bajo su actual identidad. Y el camino que los ha llevado hasta aquí ha sido tan emocionante como improbable.
Para los Thunder, es el resultado de un proyecto paciente, con jóvenes talentos liderados por el MVP Shai Gilgeous-Alexander. Con 68 victorias en la temporada regular, barrieron todo a su paso: Memphis, Denver y Minnesota. Hoy, vuelven a unas Finales por primera vez desde 2012. Esta vez, sin Durant, sin Westbrook, sin Harden. Pero con corazón y defensa.
Indiana, por su parte, rompió el maleficio. Veinticinco años después de su última aparición en las Finales, los Pacers regresan con una plantilla que combina juventud, atrevimiento y dirección. Tyrese Haliburton se ha convertido en el motor de una ofensiva fluida que ha dejado atrás a Bucks, Cavs y Knicks.
Serie abierta, futuro impredecible
Lo que hace esta serie tan especial es que no hay favoritos claros. Ambos equipos llegan con fuerza, confianza y una afición desesperada por gritar «¡campeones!» por primera vez. No hay anillos colgados en el pasado reciente. Solo hay presente, intensidad y hambre de gloria.
Todo comienza este jueves. Y gane quien gane, será un momento inolvidable para su ciudad.
