Más de 88 millones de personas en Estados Unidos se encuentran bajo advertencias y avisos de calor excesivo debido a las altas temperaturas que azotan el país. La ciudad de Phoenix, en Arizona, ha experimentado un récord de varios días consecutivos con temperaturas superiores a los 43 grados Celsius.
El humo proveniente de numerosos incendios forestales en Canadá está causando alertas de mala calidad del aire en diversas áreas, incluyendo la región de Nueva Inglaterra y lugares del sur de Estados Unidos, como Atlanta en Georgia y Birmingham en Alabama.
Este martes, Phoenix se enfrenta al 18° día consecutivo con temperaturas extremadamente altas y no se espera que la situación cambie en los próximos días. Un estudio reciente destaca que durante una ola de calor con un corte en el suministro de energía eléctrica, la ciudad podría enfrentar al menos 12.000 muertes y cientos de miles de personas necesitarían tratamiento médico debido a enfermedades relacionadas con el calor.