El conflicto en Gaza sigue escalando, y en las primeras horas de este jueves, el Ejército israelí intensificó sus ataques en la zona occidental de Rafah y el campamento de refugiados de Nuseirat, resultando en decenas de muertos y heridos, según informes palestinos. Aviones de combate Apache, tanques y barcos bombardearon edificios residenciales, provocando una trágica pérdida de vidas y dejando a muchos más heridos.
Los equipos de rescate han recuperado cuerpos entre los escombros, incluyendo en el campamento de Nuseirat, donde varios niños resultaron heridos. La agencia palestina Wafa reporta que la artillería israelí atacó viviendas de civiles, causando una devastación considerable.
Por su parte, el Ejército israelí declaró haber eliminado a más de diez milicianos y destruido múltiples objetivos en Gaza, incluyendo estructuras militares y lanzacohetes. Estas operaciones son parte de lo que denominan «redadas selectivas», enfrentándose a milicianos cuerpo a cuerpo y atacando posiciones estratégicas.
La situación en Gaza es crítica, con más de 37,200 gazatíes muertos, en su mayoría mujeres y niños, y cerca de 85,000 heridos. La desnutrición y la falta de atención médica ponen en riesgo la vida de miles de niños. Además, la acumulación de más de 330 mil toneladas de desechos en áreas pobladas agrava la crisis humanitaria y medioambiental.
El conflicto sigue causando un inmenso sufrimiento, y la comunidad internacional observa con creciente preocupación la intensificación de la violencia y sus devastadoras consecuencias humanitarias.
Información de Agencia EFE fue utilizada en esta nota