Por: Rafael De Mesa / Expresión Libre.
Es difícil comprender la Vida y la Muerte, pero cuando la VIDA deja un legado, quedan grandes recuerdos, aportes, anécdotas e historias que demuestran cuán grande fue el fallecido.
JOSÉ JÁQUEZ deja una impronta que se avala en los distintos roles que desempeñó, lo que le permitió construir desde abajo una trayectoria que lo convirtió en una figura nacional.
Comenzó a ejercer el periodismo en su pueblo natal. Su participación en los medios de comunicación de Santiago fue constante y en crecimiento. Escribió prácticamente en todos los periódicos nacionales, desde La Información, Hoy, El Sol, La Noticia, Última Hora, El Nacional y Listín Diario, entre otros. Trabajó en la Situación Mundial en Ondas del Yaque, y en Radio Amistad con Ramón De Luna, Minucha y Huchy Lora. Ya establecido en la capital, su talento se amplió al trabajar junto a las principales figuras de la televisión dominicana, como Freddy Beras Goico, Yaqui Núñez, Cuquín Victoria, Roberto Salcedo, Felipe Polanco y Julio César Matías (Pololo), entre otros.
JOSÉ JÁQUEZ fue presentador, humorista, libretista, periodista y escritor. Uno de sus últimos libros fue sobre la vida de Joseíto Mateo, y escribió numerosos libros de cuentos. Además, supo preservar mediante la literatura y sus libros a todos aquellos personajes que enriquecen la cultura de su San José de las Matas.
En San José de las Matas, José Jáquez fue monaguillo, sacristán y hasta encargado de la oficina parroquial. También fue scout, formó parte de la histórica Tuna Santa Ana, fundó el grupo de poesía coreada Sangre y Sierra, dirigió los grupos estudiantiles y luchó por las necesidades de su pueblo.
Aunque controvertido para unos y polémico para otros, José fue un convencido de su verdad, y eso lo convirtió en una figura destacada. Defendía su verdad a capa y espada.
Repito, fue un triunfador en todo lo que hizo: radio, televisión, periódicos y humor. Como imitador de políticos dominicanos, a veces era difícil distinguir si quien hablaba era el Dr. Balaguer o José Jáquez, el profesor Juan Bosch o José Jáquez. Fue un imitador inimitable, y sus imitaciones de Don Simón Alfonso Pemberton en las carreras de caballos son memorables.
JOSÉ JÁQUEZ es un ejemplo de que se puede trascender sin importar la condición social, política, económica o cultural. Siempre se puede crecer cuando se tiene talento. Su cultura era amplia, dominaba cualquier tema y era un gran improvisador.
Gracias, José Jáquez, por tu amistad de siempre. Lo que nos separaba siempre será pequeño comparado con lo gigante que fuiste. Nadie podrá negar tu capacidad y talento. Aunque te has ido al mundo desde donde no se regresa jamás, nos queda la esperanza de volver a reunirnos para reanudar las tertulias culturales que siempre hacíamos.
Mi solidaridad con toda la familia Jáquez. VETE EN PAZ.