Una leyenda que sigue dando batalla
Manny Mota se recupera y está respondiendo bien a los tratamientos médicos luego de sufrir un derrame cerebral el pasado lunes por la noche, según informó su hijo José Mota a ESPN Digital.
La leyenda dominicana de los Dodgers de Los Ángeles se encuentra estable, alerta y descansando en un hospital de la ciudad, mientras médicos y familiares mantienen un monitoreo constante de su estado de salud. La noticia fue confirmada oficialmente por el equipo a través de sus redes sociales, provocando una ola de solidaridad entre fanáticos, excompañeros y jugadores de Grandes Ligas.
“Papá nunca perdió el sentido durante el incidente y ahora mismo está evolucionando bien”, comentó José Mota, expelotero y narrador del equipo angelino.
Una vida dedicada al béisbol y la comunidad
A sus 87 años, Manny Mota se recupera rodeado del mismo espíritu de lucha que lo convirtió en una figura clave dentro y fuera del terreno. Desde que debutó en 1962 con los Gigantes de San Francisco, hasta sus 13 años como jugador de los Dodgers, Mota se ganó el respeto de varias generaciones de peloteros.
Bateó para .304 en más de 4,200 apariciones y fue una de las figuras más temidas como bateador emergente, con 150 hits desde esa posición, un récord que sostuvo durante 20 años. Además, fue convocado al Juego de Estrellas en 1973 y terminó su carrera en MLB con un promedio de .315 solo en su tiempo con los Dodgers.
Pero su legado va más allá del diamante. Mota ha sido coach, comentarista y enlace comunitario por más de cinco décadas. En República Dominicana también dejó una huella imborrable: es el líder histórico de bateo en la Liga Dominicana con .333 y campeón como dirigente con los Tigres del Licey.
Hoy, el béisbol se une en apoyo a una figura que lo ha dado todo por el deporte y por su gente. Su familia agradece las oraciones y muestras de cariño de miles de fanáticos en todo el mundo.