La naturaleza alzó la voz y el país aún cuenta los daños
Los números duelen más que la lluvia. Más de 323 mil personas afectadas por lluvias están hoy sin agua potable, mientras el país sigue en vilo. La tierra no da tregua y el cielo no para de llorar. Las lluvias de los últimos días han desbordado ríos, inundado casas y dejado a comunidades enteras incomunicadas.
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) lo confirmó: 38 acueductos han salido de servicio. Eso significa que más de 323,000 hogares, familias, niños y adultos mayores, hoy abren el grifo y no reciben más que aire. Agua que falta justo cuando más se necesita.
Desplazamientos, casas anegadas y comunidades aisladas
La emergencia no se queda en el agua. Ya son 3,690 personas desplazadas de sus hogares. Son 738 viviendas que han recibido más lluvia que esperanza. Son 15 comunidades cortadas del resto del país por caminos que ya no existen o ríos que se volvieron muros.
Los principales estragos se concentran en Espaillat, Monte Plata, Puerto Plata, La Vega, Azua, San Juan, Hermanas Mirabal y Santo Domingo. En este último, el barrio Samaria, en Pantoja, amaneció bajo agua: 20 viviendas inundadas, sueños flotando entre lodo y silencio.
El COE ha elevado la alerta roja para varios municipios, como Gaspar Hernández (Espaillat), Montellano, Villa Isabela y Sabaneta de Yásica (Puerto Plata), y Tireo (La Vega). En alerta amarilla están otras 17 provincias, incluido el Gran Santo Domingo y el Distrito Nacional.
Un llamado urgente a la prudencia
Mientras las lluvias siguen, las autoridades piden precaución. No cruzar ríos ni cañadas crecidas. Evitar zonas de deslizamiento. Protegerse a tiempo. La naturaleza no avisa dos veces.
El agua que falta en casa, sobra en las calles. Y con ella, la incertidumbre. Afectados por lluvias no es solo una frase de informe: es el rostro de miles que esperan soluciones, agua limpia y la vuelta a una normalidad que hoy parece lejana.
en RD
La naturaleza alzó la voz y el país aún cuenta los daños
Los números duelen más que la lluvia. Más de 323 mil personas afectadas por lluvias están hoy sin agua potable, mientras el país sigue en vilo. La tierra no da tregua y el cielo no para de llorar. Las lluvias de los últimos días han desbordado ríos, inundado casas y dejado a comunidades enteras incomunicadas.
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) lo confirmó: 38 acueductos han salido de servicio. Eso significa que más de 323,000 hogares, familias, niños y adultos mayores, hoy abren el grifo y no reciben más que aire. Agua que falta justo cuando más se necesita.
Desplazamientos, casas anegadas y comunidades aisladas
La emergencia no se queda en el agua. Ya son 3,690 personas desplazadas de sus hogares. Son 738 viviendas que han recibido más lluvia que esperanza. Son 15 comunidades cortadas del resto del país por caminos que ya no existen o ríos que se volvieron muros.
Los principales estragos se concentran en Espaillat, Monte Plata, Puerto Plata, La Vega, Azua, San Juan, Hermanas Mirabal y Santo Domingo. En este último, el barrio Samaria, en Pantoja, amaneció bajo agua: 20 viviendas inundadas, sueños flotando entre lodo y silencio.
El COE ha elevado la alerta roja para varios municipios, como Gaspar Hernández (Espaillat), Montellano, Villa Isabela y Sabaneta de Yásica (Puerto Plata), y Tireo (La Vega). En alerta amarilla están otras 17 provincias, incluido el Gran Santo Domingo y el Distrito Nacional.
Un llamado urgente a la prudencia
Mientras las lluvias siguen, las autoridades piden precaución. No cruzar ríos ni cañadas crecidas. Evitar zonas de deslizamiento. Protegerse a tiempo. La naturaleza no avisa dos veces.
El agua que falta en casa, sobra en las calles. Y con ella, la incertidumbre. Afectados por lluvias no es solo una frase de informe: es el rostro de miles que esperan soluciones, agua limpia y la vuelta a una normalidad que hoy parece lejana.