Fundéu Guzmán Ariza orienta sobre el uso adecuado de mayúsculas y minúsculas en esta época litúrgica
Con el inicio de la Semana Santa, la Fundación del Español Urgente (Fundéu Guzmán Ariza) ha compartido una serie de recomendaciones para escribir con propiedad los términos y expresiones más comunes en esta festividad cristiana. El objetivo es evitar errores frecuentes en la redacción de textos religiosos, litúrgicos o periodísticos.
La primera regla es clara: Semana Santa, al igual que Semana Mayor, debe escribirse con mayúscula inicial en ambas palabras, por tratarse del nombre de un período litúrgico. Lo mismo ocurre con otras celebraciones de la tradición cristiana como la Cuaresma o la Pascua.
Días santos y nombres religiosos, también en mayúscula
Otra de las recomendaciones clave es el uso de mayúsculas en los nombres que identifican fechas específicas dentro de la Semana Santa: Domingo de Ramos, Jueves Santo, Viernes Santo y Domingo de Resurrección. También se aplica esta regla a Miércoles de Ceniza y Viernes de Dolores.
Cuando se trata de imágenes religiosas, cofradías o entidades, Fundéu señala que lo correcto es utilizar la mayúscula inicial en todos los términos significativos y evitar comillas o cursivas. Ejemplos recomendados: Nuestra Señora del Carmen, Jesús Nazareno o Las Mercedes.
Minúscula para términos comunes y cargos
Sin embargo, no todo se escribe en mayúscula. Palabras como misa, procesión, eucaristía, comunión o confesión deben mantenerse en minúscula, al igual que los nombres de los cargos eclesiásticos como papa, arzobispo, obispo o monseñor.
En cuanto al tradicional viacrucis, Fundéu recuerda que debe escribirse en minúscula y sin guion, aunque también se admite la variante vía crucis, escrita como dos palabras.
Finalmente, se aclara que la palabra Iglesia lleva mayúscula solo cuando se refiere a la institución como tal (la Iglesia católica), mientras que los adjetivos que indican denominaciones religiosas se escriben con minúscula.
Estas precisiones cobran especial relevancia durante esta época en la que proliferan mensajes religiosos, publicaciones en medios y redes sociales. Un uso correcto del lenguaje fortalece la expresión de la fe y el respeto a la tradición.
Fuente: Fundéu.do