Un acto para no olvidar
Virgilio Martínez Reyna sigue presente. No solo en los libros, sino también en el alma de San José de las Matas, que este viernes lo recordó con un emotivo acto en el bulevar histórico de la avenida Manuel Tavares.
Allí fue develado un busto con motivo del 140 aniversario de su nacimiento y los 95 años de su vil asesinato, en un homenaje impulsado por la Cooperativa San José.
El evento fue encabezado por el doctor Piero Espinal Estévez, presidente del Consejo de Administración de la cooperativa, quien resaltó que «honrar la memoria de quienes dieron su vida por la libertad es una responsabilidad moral que trasciende generaciones».
Un legado sembrado en la Sierra
Martínez Reyna llegó a Las Matas en 1925. Desde entonces, se convirtió en un referente de servicio, solidaridad y liderazgo. Donó la primera planta eléctrica del pueblo, ayudó a familias necesitadas con alimentos y medicinas, regalaba juguetes a los niños y promovía el desarrollo urbano y humano.
Fue educador, poeta, funcionario y figura clave del horacismo. Su cercanía con el presidente Horacio Vásquez logró que San José de las Matas recibiera la atención del Poder Ejecutivo en varias ocasiones.
Pero su firme oposición al naciente régimen trujillista le costó la vida. El 1 de junio de 1930 fue asesinado junto a su esposa embarazada. Su crimen, considerado el primero de la dictadura, marcó el inicio de una era oscura.
Una figura que inspira
El busto que hoy adorna el bulevar no es solo una pieza simbólica. Es un gesto de justicia histórica, de memoria activa y de respeto por quien dio todo por su pueblo. Bajo la dirección del Dr. Piero Espinal, la Cooperativa San José reafirma así su compromiso con la historia y los valores que sustentan la identidad de la Sierra.
Recordar a Virgilio Martínez Reyna es también recordarnos a nosotros mismos que la dignidad, la valentía y el servicio son caminos que no deben olvidarse nunca.