Dos de las empresas imputadas en el caso Coral sobre corrupción administrativa alcanzaron un acuerdo con el Ministerio Público mediante el cual entregarán al Estado dominicano 20 millones de pesos y 3,000 salarios mínimos cada una, informó este martes el órgano persecutor en un documento.
El acuerdo, alcanzado bajo la figura del procedimiento penal abreviado, establece también la disolución de esas empresas, la clausura de los locales que utilizaban y el decomiso de los bienes que puedan tener a su nombre, según lo dispuso el Sexto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, que aprobó el acuerdo.
Las empresas en cuestión son Meljo Comercial y Optimus, empresas individuales de responsabilidad limitada (EIRL) que, de acuerdo al Ministerio Público, se determinó que sus representantes sirvieron de «presta nombres» o testaferros al coronel Rafael Núñez de Aza y la madre de sus hijos, la primer teniente Jehohanan Lucía Rodríguez, quien son los dueños reales de las sociedades comerciales y están imputados en el caso.
El fiscal adscrito a la Procuraduría Especializada de Persecución a la Corrupción Administrativa (Pepca), Jonathan Pérez Fulcar, afirmó que las personas que figuraban como dueñas de esas empresas «no tienen el perfil económico acorde».
Uno de ellos es pintor del municipio de Santo Domingo Oeste y la otra es una joven estudiante que trabajaba en la casa de la imputada Jehohanan Lucía Rodríguez, a la cual puso a firmar un documento para colocarla como dueña, a pesar de no tener el perfil ni el conocimiento de las operaciones, agregó el magistrado.
Mientras, el abogado del Estado dominicano José Alberto Ortiz afirmó que los gerentes de las empresas Meljo Comercial y Optimus se sumarán como testigos de la acusación del Ministerio Público y de la demanda civil que representa.
Fuente: La Información.