El informe de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU destaca la necesidad de intervención internacional en Haití debido a la creciente crisis de seguridad y violencia que ha dejado miles de muertos y secuestros en el país.
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU ha presentado un informe alarmante sobre la crisis en Haití, donde la violencia de bandas ha cobrado la vida de más de 2.400 personas y se han producido al menos 951 secuestros este año.
El informe resalta la necesidad de una intervención internacional urgente y una misión multinacional de apoyo en seguridad para ayudar a la policía nacional haitiana. Además, el informe señala que las bandas armadas en Haití han evolucionado hasta convertirse en grupos autónomos que controlan grandes áreas del país, lo que ha llevado a una situación insostenible para la población.
La brutalidad de estas bandas, que reciben armas desde Estados Unidos, está en constante aumento y se han documentado mutilaciones y quemas públicas de personas.
La situación en Haití requiere atención y acción inmediata por parte de la comunidad internacional para evitar una catástrofe humanitaria aún mayor en el país caribeño.